El principal fabricante automovilístico de China está probando tecnologías que permitirían a los vehículos comunicarse entre sí a distancia
POR WILL KNIGHT - TRADUCIDO POR TERESA WOODS
Uno de los principales fabricantes de coches de China está probando tecnología que promete prevenir los accidentes y aliviar el tráfico al permitir que los vehículos, además de las señales de tráfico, se comuniquen por wifi. Aunque no se ha establecido ningún estándar en China todavía, representantes de la empresa dicen que podría introducir algún tipo de comunicaciones coche a coche en 2018, adelantándose así a muchos fabricantes estadounidenses.
Changan, una empresa fabricante de coches, propiedad del gobierno Chino, radicada en Chongquing en China central, está probando las tecnologías llamadas vehículo a vehículo (V2V, por sus siglas en inglés) y vehículo a infraestructura (V2I, por sus siglas en inglés) desde su centro de I+D en Plymouth, Michigan (EEUU). La empresa no comercializa sus vehículos en Estados Unidos y dice que no tiene planes de entrar al mercado estadounidense. Pero el hecho de que pruebe la tecnología V2V en su centro en Estados Unidos sugiere que ve un futuro para ella en su país de origen.
Se promociona la tecnología V2V en Estados Unidos y Europa como un método barato y eficaz de prevenir los choques y de controlar el flujo del tráfico. Los vehículos equipados transmiten información útil, incluido su ubicación, velocidad y la dirección de su trayectoria, y los ordenadores a bordo de cada coche utilizan esta información paraidentificar una colisión inminente y emitir una alarma (ver TR10: Comunicación entre coches). Algunas empresas también están desarrollando sistemas de comunicación personalizados que permiten que los vehículos comerciales se desplacen de una manera altamente eficiente: en un convoy de alta velocidad (ver Un convoy de camiones sin conductor).
Después de una prueba exitosa de la tecnología que incluía varios miles de coches en Ann Arbor, Michigan (EEUU), se espera que el Departamento del Transporte estadounidense emita especificaciones para la tecnología este año. Tendrá su debut en un Cadillac de alta gama en 2017 y algún día puede que incluso sea de incorporación obligada en los coches nuevos en Estados Unidos (ver El Internet de los coches se acerca a una encrucijada). El panorama en China está menos claro, donde el gobierno está investigando la tecnología vehículo a vehículo, pero aún no ha dado ninguna indicación acerca de cuándo podría implementarse.
Tuve la oportunidad de montar en uno de los coches de Changan en Ann Arbor, un pequeño todoterreno llamado CS35, equipado con tecnologías V2V y V2I. El todoterreno llevaba incorporado un transmisor inalámbrico y un receptor conectados a una tableta Android colocada en el salpicadero. Un aviso se emitió cuando otro coche equipado con la misma tecnología se aproximó en una intersección ciega. Otro aviso saltó cuando el coche cogió una curva pronunciada a demasiada velocidad (gracias a las señales emitidas por una baliza de carretera).
Uno de los retos de la tecnología V2V es que tardará un tiempo en volverse ubicuo. Aunque el mercado automovilística chino es actualmente el más grande del mundo, la propiedad de automóviles per cápita es todavía muy inferior en China que en Estados Unidos, Europa o Japón. China también está muy por detrás de Estados Unidos, Europa y Japón en el desarrollo tecnológico.
El estudiante de doctorado de la Universidad de Carnegie Mellon (EEUU) John Helveston dice que los fabricantes de coches extranjeros – que dominan el mercado en China – prefieren comercializar allí tecnología antigua. Y aunque los fabricantes domésticos se interesan por los sistemas V2V, "no sería tan interesante si sólo cinco de cada 100 coches pueden comunicar entre sí", dice. (MIT)
No hay comentarios:
Publicar un comentario