El Centro de Estudios para la Inclusión Social, indicó que el circuito urbano que organizó el gobierno porteño para este fin de semana, "presenta importantes fallas en la seguridad e los espectadores, pilotos y trabajadores afectados al evento deportivo".
César Len, ingeniero civil que integra el CEIS, sostuvo que "no se estarían cumpliendo las condiciones mínimas de seguridad para los espectadores y habitantes de la zona, ya que pudimos constatar que los módulos de hormigón armado para contención, que funcionarían como guarda rails, están simplemente apoyados sobre la calle".
Precisó que esta situación genera que "aunque los módulos estén unidos entre sí por alambrados, será muy difícil que resistan el choque de un auto a más de 100 kilómetros por hora".
Len indicó además que "la calle Tagle es demasiado angosta para la velocidad a la que van a doblar por allí los vehículos y allí también se colocó un guarda rail distinto, formado por chapas, que están apoyadas solamente en bolsas de arena".
El ingeniero sostuvo que la curva de retome de Figueroa Alcorta desde Tagle, "aparenta ser muy peligrosa por ser de 90 grados", por lo que "si llegara a haber gente en ese lugar, el peligro aumentaría exponencialmente".
"Otra cuestión es que en esa misma esquina el pavimento está arreglado en una parte", dijo Len y añadió: "Eso provocaría un cambio brusco en la adherencia de los neumáticos de los coches al doblar, hecho que se agravaría además en caso de lluvia".
La carrera de Super TC2000 se corre este fin de semana en un circuito callejero conformado por las avenidas del Libertador, Figueroa Alcorta y Tagle, lo que generó quejas de vecinos, legisladores y ambientalistas, quienes advirtieron por los graves peligros que conlleva implementar un circuito en pleno barrio de Recoleta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario