sábado, 19 de octubre de 2013

Blinkifier: Controlando un helicóptero con las pestañas

Blinkifier: Controlando un helicóptero con las pestañas
La era de las micro interacciones está aquí pero también se sigue moviendo, como si fuera el Universo, expandiéndose y creando nuevas formas de hacer las cosas. Por ejemplo, gracias a los electro-cosméticos como Blinkifier, ahora es posible controlar un helicóptero con las pestañas, tocar un piano imaginario con las uñas o hacerse el DJ remojando las manos en agua.

Tranquilamente podría ser el nuevo video de Lady Gaga, pero en realidad se trata de una muestra más de lo creativa y productivamente locos que están algunos artistas visuales. Las demostraciones de lo poco comunes gadgets no dejan de asombrar y siempre tenemos algo nuevo bajo el sol, especialmente gracias a los minúsculos que se hacen los chips y a la potencia y capacidad de almacenan. Colocados sobre todo tipo de dispositivos, en la era de los drones y de los aparatos automatizados de auto conducción, en esta ocasión tenemos un vídeo sobre un helicóptero controlado con un guiño. Bienvenido a la era de los electro-cosméticos.

En el vídeo se ven varios modelos de dispositivos que entran en el rubro de los electro cosméticos, pero el que nos llamó mucho la atención fue el de las pestañas-mando de control. Gracias al maquillaje metálico del artista informático Katia Vega, cuando el ojo de la modelo se cierra juntando las pestañas, el circuito se cierra y se completa, lo que le envía una señal a un transmisor de radio que le indica al helicóptero que despegue. El helicóptero es un vehículo de juguete a control remoto, pero cuyos mandos se han transferido a la delineador metálico conocido como Blinkifier.

La presentación de tan estrafalario artilugio se realizó en el marco de la presentación del Vega’s Beauty Technology, el proyecto del artista. Adicionalmente también se mostraron otras invenciones que hacen uso del delineador, como la posibilidad de cambiar las luces LED de un sombrero o de un vestido. También se probó una pintura para uñas que tenía etiquetas RFID con las que podía tocar un piano virtual. Por último, una combinación entre estas uñas y una red transmisora pudo convertir agua en dos bandejas de DJ con las cuales mezclar música y hace una especie de scratching muy particulares. Otro día más, otro poquito de asombro tecnológico. Neoteo

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